Treinta y ocho víctimas de trata de personas son atendidas por un equipo de trabajadoras sociales y psicólogas de la Oficina contra la Trata de Personas del Ministerio de Seguridad Pública, en lo que va de este año. Dayra Campos, directora de esta oficina, explicó que este año las víctimas de este delito no son extranjeras, tal como ocurría antes de la pandemia, ahora son panameñas menores de edad, entre los seis y 15 años. Las menores de edad identificadas preliminarmente, dijo Campos, fueron rescatadas mediante la “Operación Luz de Esperanza” en el cordón fronterizo entre Panamá y Costa Rica. “Lamentablemente, en algunos casos, los padres de familia o los que tienen la guarda y crianza se prestan para este delito, lo cual constituye un agravante a la conducta tipificada en la Ley”. El modus operandi de estas organizaciones dedicadas a la trata de personas, explicó Campos, es la utilización de las redes sociales con información falsa, para ofrecer becas y plazas de empleo sin los permisos correspondientes. En los últimos tres años se han rescatado a 95 personas víctimas de este flagelo, quienes han sido evaluadas por trabajadoras sociales y han recibido atención psicológica.