El ministro de Seguridad Pública, Juan Manuel Pino, el Procurador General de la Nación, Javier Caraballo, el director de la Policía, John Dorheim y el fiscal de crimen organizado, Guillermo Marquez se reunieron con la Junta Directiva y representantes de la Cámara Panameña de la Construcción (CAPAC) para conversar sobre la seguridad en los proyectos de construcción que se desarrollan en diversos puntos del país. Durante la reunión, los agremiados plantearon la necesidad de mejorar la seguridad en las obras de construcción mientras que los representantes del Ministerio de Seguridad y del Ministerio Público expresaron la importancia de presentar las denuncias para que se pueda proceder con las investigaciones correspondientes y que exista la certeza del castigo. Los empresarios aseguraron que hay grupos que se autodenominan “pacificadores del barrio”, que se amparan en el programa barrio seguro y que son pandilleros que llegan a los proyectos a ofrecer supuesta seguridad, pero que en realidad lo que buscan es presionar a los ingenieros de las obras para que los contraten, por 800 dólares mensuales, sin que eso implique ninguna responsabilidad laboral. “El problema es que los integrantes de estos grupos delincuenciales no cuentan con ninguna preparación, dicen que estuvieron en Barrio Seguro, llegan con amenazas y quieren que se les contrate y se les pague un salario sin trabajar en los proyectos”, aseguró uno de los empresarios durante la reunión. El presidente de la CAPAC, Carlos Allen calificó el encuentro como positivo y dijo que se trató de una reunión ordinaria para hablar de la seguridad en los proyectos y mejorar la comunicación con el Ministerio de Seguridad Pública, el Ministerio Público y la Policía Nacional.
