En una reciente entrevista con la cadena internacional de noticias CNN, el ministro de Seguridad Pública de Panamá, Frank Alexis Abrego, abordó la postura firme del gobierno panameño en relación con la crisis migratoria en la región.

En su intervención, Abrego destacó que Panamá mantiene una política migratoria clara y estricta, señalando que no se aceptarán migrantes indocumentados ni se permitirá que continúe el paso irregular a través del país.

El ministro enfatizó que, ante el cambio de gobierno en Estados Unidos, es de esperar que se ajusten las políticas exteriores hacia la región. Sin embargo, Panamá no alterará su enfoque en el manejo del flujo migratorio.

«No aceptaremos a ningún migrante que no cumpla con las normativas legales vigentes. Nuestra postura es clara: mano firme para garantizar la seguridad y el orden», afirmó Abrego.

En su intervención, el ministro también enfatizó la estrecha cooperación con Colombia en el control de las fronteras, resaltando el papel fundamental del Servicio Nacional de Fronteras (Senafront) y el refuerzo de la seguridad por parte del ejército colombiano. También hizo especial énfasis en la presencia de organizaciones criminales como el Clan del Golfo y el Tren de Aragua, que han intentado aprovecharse de la situación migratoria para incrementar sus actividades ilícitas en la región.

«No permitiremos que estos grupos sigan operando en nuestras fronteras», aseguró.

Un tema clave que Abrego abordó fue el impacto social y económico del paso de migrantes a través de las comunidades indígenas del Darién.

El funcionario expresó su preocupación por la alteración de los modos de vida tradicionales de los pueblos originarios, quienes se ven forzados a abandonar sus actividades productivas para ayudar a los migrantes, lo que ha generado una economía insostenible y perjudicial para la región.

A través de un trabajo conjunto con los líderes indígenas, se ha acordado frenar el apoyo irregular a los migrantes en sus trayectos.

«Le hago un llamado a aquellos migrantes que intentan tomar el camino equivocado: reconsideren su decisión. No pongan en riesgo sus vidas ni las de otros. Existen opciones más seguras», afirmó Abrego, reforzando la política de Panamá en cuanto al control migratorio.

Abrego también destacó la exitosa colaboración entre Panamá y Estados Unidos en la lucha contra el narcotráfico, especialmente en el monitoreo de las rutas marítimas.

Con estas declaraciones, el gobierno de Panamá reafirma su compromiso con una política migratoria responsable, que prioriza la seguridad de su población, la cooperación regional y el respeto a las leyes nacionales frente a la creciente presión migratoria en la región.